¡Mi estancia en este hotel fue fantástica! Obtuvimos una excelente relación calidad-precio y la habitación era impresionante, con hermosas vistas al Monte Fuji. La ubicación también era perfecta, muy cerca de la estación. El personal fue amable y servicial en todo momento.

Las delicias para el desayuno fueron variadas y deliciosas, pero podrían mejorar la información para los huéspedes que no hablan japonés sobre el uso del onsen.

Hotel tradicional con un diseño bonito. Las camas eran enormes y cada habitación barata tenía una caja fuerte, una plancha y tabla de planchar, una chimenea de piedra. Su ubicación no podía ser más perfecta respecto a los puntos turísticos. También estaba al lado de una parada de autobús, de los parques, del lago👍

Ubicación excelente cerca de la estación. Bonitas zonas comunes con onsen público y opción de pago para onsen privado. Posibilidad de cata de vinos en la zona común. Desayuno tipo buffet con muchas opciones. Ambiente agradable.

Habitaciones de buen tamaño y compactas con una vista increíble y un baño privado y desayuno delicioso. Tiene un hervidor eléctrico y una lavadora.

nuestra estancia en fujikawaguchiko fue increíble gracias al personal excepcional del hotel, el onsen gratuito y la tienda de regalos asequible. Las habitaciones eran geniales, con la experiencia de dormir en un ryokan y vistas al monte fuji desde la habitación.

Falta de privacidad en la regadera de la habitación.

Me encantó la habitación amplia y con todos los complementos necesarios. Los onsens son una maravilla, especialmente las vistas al Fuji. Además, el hotel ofrece servicio de transporte a la estación y está cerca de restaurantes y tiendas.

Me sentí como en casa, no tengo ninguna razón para quejarme.

Nuestro alojamiento en el hotel fue excelente. A pesar de algunas pequeñas complicaciones, disfrutamos de unas instalaciones bonitas y acogedoras. El personal fue atento y nos brindaron toda la información que necesitábamos en un idioma que comprendíamos. Además, la ubicación cerca de restaurantes y supermercados fue muy conveniente. Definitivamente recomendamos este hotel.

Servicio de pickup desde la estación, trato excelente, habitación amplia y confortable con vistas al Monte Fuji, desayuno variado y de calidad.

No se puede culpar a la propiedad de ninguna manera.

El hotel en general es bonito y el ryokan es agradable. La ubicación es muy buena, cerca de la estación de autobuses. Zonas comunes bonitas, con onsen público y opción de onsen privado de pago. La opción de cata de vinos en la zona común es muy curiosa. El bufete de desayuno ofrece muchas opciones y todo está bueno. Las habitaciones son geniales, dormir en un ryokan es toda una experiencia. El trato del personal es correcto. El onsen es una pasada, especialmente disfrutarlo por la noche. En las habitaciones hay yukatas disponibles para utilizar. Las vistas al Fuji desde la habitación son increíbles.

De verdad que lo aconsejo.

Me encantó este hotel. Está ubicado en un barrio muy tranquilo y rodeado de hermosas vistas. El personal de recepción fue muy amable y servicial. Las habitaciones eran muy cómodas y tenían todas las comodidades que necesitaba, como aire acondicionado, televisión de pantalla plana y hervidor eléctrico. Además, el hotel tenía un jacuzzi y un baño termal al aire libre, lo cual fue una experiencia increíble. También había un restaurante y un bar en el lugar, lo que hizo que fuera conveniente para disfrutar de deliciosas comidas y bebidas. Recomiendo este lugar a cualquiera que esté buscando un hotel lujoso y cómodo con excelentes servicios.

No tengo ninguna queja sobre este hotel. Fue una experiencia fantástica y todos los aspectos del hotel cumplieron con mis expectativas.

Servicio de traslado conveniente, hermosas vistas al Monte Fuji desde el onsen, amabilidad del personal, amplios horarios de los onsen y habitaciones estilo japonés encantadoras.

No había nada que no me gustara.

El hotel está convenientemente ubicado cerca de la parada de autobús, lo que facilita el transporte. La habitación es acogedora, amplia, y con unas increíbles vistas al Monte Fuji. El desayuno buffet ofrece una gran variedad de opciones, tanto orientales como occidentales, y la calidad es excelente. Además, el personal del hotel es amable y brinda un trato excepcional.

La decoración de los baños termales no está a la altura de un hotel de cuatro estrellas, lo cual le quita un poco de encanto a las vistas.

Elegimos este hotel por estar en un barrio muy tranquilo entre Tokyo y Kyoto y nos encantó. El servicio de limpieza de habitaciones fue impecable, siempre manteniendo todo impecable. Además, disfrutamos mucho del cómodo servicio de transporte gratuito que nos llevaba y traía a varios lugares de interés en la zona. También apreciamos las comodidades en la habitación, como las instalaciones de planchado, el aire acondicionado y las comodidades gratuitas en el baño. Nuestra estancia se destacó por el personal amable y servicial que encontramos en la recepción. Fueron muy atentos y siempre dispuestos a ayudar con cualquier pregunta o solicitud que tuviéramos.

Recomendaríamos este hotel a nuestros amigos.

Ubicación muy buena, cerca de la estación. Zonas comunes muy bonitas. Onsen público y opción de pago de onsen privado. Opción de cata de vinos en la zona común muy curiosa. Bufete de desayuno con muchas opciones y todo lo que probamos estaba bueno. Servicio de pickup desde la estación de tren disponible desde las 14:30. Habitación amplia, confortable y con vistas al Monte Fuji. Onsen al aire libre en la planta baja. Personal acogedor y servicial.

Os recomiendo este fantástico lugar.

Desde hace tiempo deseaba visitar el Museo Kawaguchiko Konohana, y elegí el Oike Hotel por su conveniente ubicación. Sin embargo, una de las características del hotel me sorprendió gratamente: no se permiten mascotas ni animales de servicio en esta propiedad. Además, me encantó que el Oike Hotel ofreciera un baño termal mineral cubierto, una cafetería y un bar.

El baño termal privado en Oike es pequeño y cerrado, a pesar de estar al aire libre, lo cual puede causar una sensación de claustrofobia. No vale la pena pagar tanto por reservarlo.